Cuando hace unos meses los partidos mayoritarios PP-PSOE comenzaron a posicionarse respecto a las elecciones europeas (lugar donde, a pesar de lo que dicen, premian a sus miembros destacados a los que no han encontrado mejor chollo para que se lucren una temporada y hagan curriculum), el señor Rajoy comenzó su estrategia de D. Tancredo haciéndose el interesante, en una supuesta operación con final sorpresa negándose a hacer pública su designación digital de candidato para encabezar la lista de su partido al Parlamento Europeo, a pesar de que tanto en su partido como los medios afines (que ya son casi todos) citaban al tragaldabas de Arias Cañete como mejor posicionado para la prebenda. El mismo interesado jugaba al escondite haciéndose querer y negando que fuera a dejar el ministerio de agricultura "a quien tanto debemos". Así ha sido la cosa durante este mes. Los homónimos europeos del Sr. Cañete le felicitaban mientras él negaba la mayor, el PP se dejaba querer por la supuesta opinión pública (como si a la mayoría de ciudadanos nos interesara ya mucho a quién le conceden el chollo), y salvo un amago de que pudiera ser el valenciano Pons el "elegido", no había nadie que dudara de que lo sería el tal Cañete. Pues bien, tras el supuesto suspense (marketing político le llaman), dios Rajoy ha extendido su dedo y el misterio se ha revelado: el cabeza de lista será.......... Cañete!!!
¡Para ese viaje no hacía falta tantas alforjas....!!!!
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